Una japonesa esperaba su turno para ser preñada por un macho de élite. La trajeron para aparearse con un traje muy chulo. ¿Quién no aprovecharía esa oportunidad? Y allí estaba ella, ya goteando como una gata y arrastrándose bajo su polla con todas sus rendijas. La masturbación casi la llevó al orgasmo. Bien hecho, macho, hizo una pausa y luego la puso dura sobre su polla. Cumple dentro - ahora deja que le traiga a su marido un regalo de 3.400 )
Bonito coño, aunque sus pechos están un poco caídos y su culo está un poco lleno de granos. ¡Pero no me voy a meter con ella, realmente muy atractiva y sus labios funcionan! Salvo que no se la han follado por todas partes y no lo suficiente. A juzgar por ella, no le importaría otra media hora en la polla.